“Todo se cura con agua salada: con sudor, con lágrimas o con el mar”
"Out of Africa" por Isak Dinesen
Miel para las heridas, manzanilla para el dolor, vinagre para desinfectar, aceite para los oídos y, ¿por qué no sal para los granulomas?
Algo de esto debió llegar en forma de eco a nuestra compañera Rocío García cuando, hace unos meses se puso en contacto con nuestro equipo a través del formulario de este blog, escribiéndonos el siguiente mensaje:
"Buenas
tardes, soy enfermera pediátrica y no soy capaz de encontrar
evidencia sobre la cura de los granulomas con sal común.
Lo he escuchado en el caso de granulomas del cordón umbilical, pero ¿se
podría aplicar a los granulomas de la PEG (gastrostomía endoscópica
percutánea)?
Muchas gracias, un saludo".
¡Grumetes, a bordo del bote! Esta semana a PreClic nos piden evidencia sobre el tratamiento con sal común de los granulomas de las gastrostomías endoscópicas percutáneas (PEG). ¡Que nos parta un rayo si no encontramos lo que nos piden!
Banco de preguntas
Levamos anclas y el viento de Levante nos lleva a Murcia, donde Preevid nos surte de información muy interesante.
Como toma de contacto, tenemos la consulta incluida en 2019 relacionada con el granuloma del cordón umbilical (CU), que puede ser la que haya llegado a oídos de Rocío. En ella mencionan un sumario de evidencia de 2010, que indica como tratamiento el uso de nitrato de plata tópico y, en caso de que fallase, la ligadura del granuloma.
Pero no se quedan en eso, sino que al consultar Embase, PubMed y CENTRAL, hallan tres ensayos clínicos, en los que encuentran beneficioso el uso de la sal común para el tratamiento del granuloma de CU, siendo en el tercero, un ensayo no controlado de 2016 en Arabia Saudí, en el que usaron una pizca de sal durante cinco días y se reevaluó el granuloma a la primera y tercera semana. En todos los casos curó por completo. Pero claro, al ser un estudio que no compara con ningún otro tratamiento (ni siquiera la omisión del mismo), no sabemos si el efecto fue debido a la sal o no.
Por otro lado, encontramos dos preguntas sobre el cuidado de gastrostomías. Una más antigua, de 2012, que habla sobre los cuidados generales de las PEG. Y otra, reciente, de 2021, más específica, habla del tratamiento de la infección de las gastrostomías y el uso de antibióticos, de la que podemos extraer mucho jugo, cual naranja valenciana. Esta última, recoge en sus referencias la revisión de 2018 realizada por el Servicio de Aparato Digestivo del Hospital de Poniente, de El Ejido, que nos ubica en el tema que estamos tratando, al hablar de las indicaciones y contraindicaciones de las PEG, así como de sus complicaciones, clasificadas según complejidad:
Pero no es esto lo que estamos buscando, por eso seguimos indagando entre los documentos que nos facilitan en esta pregunta.
Y así llegamos al procedimiento del Servizo Galego de Saúde de 2019, donde nos señalan el tratamiento del granuloma de PEG:
Pero no encontramos restos de sal, ni montoncitos por ninguna parte; tendremos que seguir navegando a otros mares de agua salada para encontrar algo.
Guías de práctica clínica
Hemos preguntado en los puertos habituales, incluso a bucaneros venidos de lejos, pero no nos han traído ningún mapa, ni mensaje en botella alguna, que nos permita descubrir GPC relacionada con el tesoro que hemos venido a buscar en esta navegación.
Seguimos viento en popa, a toda vela.
Revisiones Sistemáticas
Como pasó en el puerto anterior, tampoco en estas tabernas encontramos corsos con ganas de entablar conversación que enriquezca nuestros cofres del saber, por lo que volvemos a virar el timón hacia un nuevo rumbo, que según nos han informado, puede traer algunos doblones bajo el garfio.
Búsqueda bibliográfica
Para poder redondear nuestro periplo, visitamos la Medline a través de PubMed para intentar conseguir más datos de los que nos interesan para concluir nuestras pesquisas. Y al preguntarle por la asociación entre granuloma y sal, nos vuelca que hay 54 trabajos relacionados.
Aunque no hay estudios que usen la sal común para el tratamiento de las gastrostomías, hemos encontrado una revisión sistemática bastante actual (del 2021) en el que incluyeron varios ensayos clínicos en los que se comparaba: sulfato de cobre vs. sal, sal vs. ninguna intervención, aplicación de sal durante dos horas vs. 24 horas, sal vs. etanol aplicación de sal durante 10 minutos vs.30 minutos y sal vs. electrocauterio. En la mayoría de los estudios el uso de la sal en el granuloma umbilical fue efectivo. Sin embargo, aunque los autores concluyen que es un método simple, efectivo, barato y con mínimas complicaciones, también comentan que la mayoría de los estudios incluidos en esta revisión presentaban un riesgo de sesgo alto (por tamaños de muestras pequeños y riesgo de sesgo incierto o alto en muchos dominios de la evaluación con GRADE).
Sin embargo, ya sabemos que el tejido que conforma los granulomas umbilicales (o piogénicos) es diferente a los de las gastrostomías, al ser mucosa gástrica.
Conclusiones PreClic
Hay estudios que avalan el tratamiento con sal común directamente sobre granulomas del cordón umbilical o de origen piogénico, siendo una opción de elección por ser barato, efectivo, accesible y sencillo de aplicar. Sin embargo la evidencia aún es insuficiente, ya que el riesgo de sesgo de estos estudios es alto.
Con respecto a tratar del mismo modo a los granulomas que se generan en las gastrostomías endoscópicas percutáneas (GEP/PEG), no hay evidencia alguna, aunque sí que disponemos de información sobre cuál sería el tratamiento adecuado, al menos hasta el momento:
- Cauterización mediante aplicación de nitrato de plata tópica.
- Ligadura del granuloma, si lo anterior no funcionara.
No consideramos conveniente asumir que se puedan equiparar los tratamientos a todos los tipos de granulomas, al ser diferentes histológicamente y, por lo tanto, tener diferentes evoluciones.
Siendo un campo interesante para investigar, recordad que si os animáis a diseñar un estudio, dejaos asesorar por alguien que domine los métodos. No cometamos siempre los mismos errores ni causemos daños evitables.
Primum non nocere
Y hasta aquí nos trajo la marea esta semana, esperando que hayáis disfrutado la travesía. Os invitamos a seguir pendientes de nuestras redes para la próxima semana y los eventos que estén por llegar.